En este mundo frio y cruel ser como niños es vital. ¿Qué cualidades propias de los niños deberíamos imitar los adultos?
Humildad: Entre los niños no hay posiciones sociales ni son unos más importantes que otros. La verdadera humildad nos mueve a servir a los demás, por desagradable que sea la tarea o insignificante la persona. No debemos ser orgullosos ni tener un espíritu competitivo que promueva peleas
Los niños son más enseñables y menos propensos al orgullo, ellos no dejan de preguntar ‘por qué’ hasta que encuentran una respuesta satisfactoria”, comenta una mujer que trabaja en una guardería. Deseamos aprender cada día algo nuevo? Investigamos por nuestra cuenta?
Los niñitos, son puros de mente y corazón
Los niños también poseen una extraordinaria capacidad de perdonar. Cierto padre dice: “Cuando nuestros hijitos Jack y Levi se pelean, hacemos que se disculpen, y al momento vuelven a jugar de lo más contentos. No hacen pataletas ni sacan a relucir cosas del pasado ni imponen condiciones antes de perdonar. Sencillamente se olvidan del asunto”. ¡Qué buen ejemplo para los adultos!
“¿Existe la posibilidad de que los adultos recuperemos las bellas cualidades que poseíamos de niños?”, tal vez se pregunten algunos. La respuesta clara y tranquilizadora es un rotundo sí.
Para ilustrarlo: un grupo de restauradores tiene ante sí una obra de arte de valor incalculable. Poco a poco van eliminando capas de suciedad acumulada y arreglan imperfecciones. Después de todo ese minucioso trabajo vuelven a relucir los vivos colores y la belleza original de la pintura.
De modo similar, con esfuerzo continuo, podemos recuperar las bellas cualidades que manifestábamos por naturaleza cuando éramos niños
Kommentare